Llamamos vino orgánico al producto hecho a base de uvas cultivadas orgánicamente y certificadas como tal, esto quiere decir que no han sido utilizados productos químicos en el proceso de cultivo y vinificación, además de tener un manejo eco amigable del agua y los recursos naturales.

Cuando abrimos un vino orgánico, disfrutamos un vino de menor intervención química, tanto en su cultivo como en su vinificación, respetando el medio ambiente en su totalidad: fauna, flora, microorganismos, recurso hídrico; y que pone atención a los cambios de la naturaleza y sus ciclos.

La clave en la viticultura orgánica se encuentra justamente en la finca, es decir, lo que es orgánico es el viñedo y, por ello, las uvas que en él se producen. Para lograr esto se reemplaza el uso de químicos sintetizados como fertilizantes, herbicidas y pesticidas por productos de origen orgánico que cumplen esas funciones. Algunas de las ideas principales en este tipo de agricultura son las de gestionar la biodiversidad en la tierra, respetar las distancias de cultivos, zonas verdes, y realizar un manejo de los suelos que los conserve y no los agote.

Pero no termina ahí, estas ideas se trasladan a la enología (el momento de hacer vino con esas uvas) buscando generar una mínima intervención en la elaboración y un mínimo uso de anhídrido sulfuroso (sulfitos) durante la elaboración, y hasta envasar los vinos en botellas tipo ecológicas que reducen el volumen de vidrio (las botellas pesan menos, por lo que se requiere menos energía para su fabricación y traslado).

El adjetivo “biodinámica” se compone a partir de los vocablos griegos “bios” que significa VIDA y “dynamis” que significa FUERZA; una agricultura que trabaja con las fuerzas que dan vida a la tierra.

Aquí nos encontramos con otra práctica que toma lugar en la finca, pero agregando un compuesto filosófico. La agricultura biodinámica utiliza conocimientos de medicina homeopática y astrología para tratar la finca de manera holística (como un todo, como un ser vivo). Además de ser un cultivo orgánico, en el viñedo biodinámico se utiliza “El Calendario Biodinámico”, el cual es la base de esta modalidad agrícola, donde a lo largo de cada día del año se establecen con exactitud astronómica (contemplando las constelaciones planetarias, la Luna y el Sol) los momentos óptimos para trabajar las diferentes partes de la viña: hoja, raíz y frutos.

Las plantas se fertilizan con preparados naturales de origen animal (Compost) y las plagas se controlan con preparados homeopáticos vegetales (previniendo bacterias, hongos e insectos). Siempre desde un principio de unidad entre el hombre, las plantas, los animales y la tierra. Una diferencia clave con los vinos orgánicos es que éstos pueden utilizar uvas comprada de viñedos certificados, mientras que en los biodinámicos no se permite utilizar nada que no provenga de la propia finca; además, los vinos biodinámicos deben fermentar obligadamente con levaduras indígenas (las propias del viñedo).

Región: D.O. Valle de Colchagua - Chile
Variedad: Carmenere
Tipo: Vino Tinto
Alcohol: 13.5 %
Temperatura: 17º C
Capacidad: 750 ml
Maridaje: Carnes blancas, Carnes rojas, Quesos maduros.

Región: D.O. Valle de Colchagua
Bodega: Emiliana Organics
Variedad: 100 % Syrah
Tipo: Vino Tinto Biodinámico Reserva
Roble Francés: 6 meses
Alcohol: 14 %
Temperatura: 16º - 18º C
Capacidad: 750 ml
Maridaje: Carnes rojas al horno o a la parrilla, Costillas de cerdo, Guisos suavemente condimentados, Quesos maduros, Frutos secos.

Región: D.O. Ribera del Duero - España
Variedad: 100 % Tempranillo
Roble: 4 meses
Alcohol: 14 %
Temperatura: 15º C
Capacidad: 750 ml
Maridaje: Arroces, Pastas, Carnes.

Región: D.O. Valle de Rapel - Chile
Bodega: Emiliana Organics
Variedad: 100 % Syrah
Tipo: Vino Rosado Biodinámico Reserva
Guarda: 3 meses en tanques de acero inoxidable.
Alcohol - pH: 12.5 % - 3.19
Temperatura de Servicio: 10º C - 12º C
Capacidad: 750 ml
Maridaje: Recomendado para Pescados, Mariscos, Aperitivos, Sushi, Quesos cremosos y Postres con frutas.